Ventajas de este plato: está buenísimo, es muy simple y se hace solo.
Inconvenientes: cuando más pega es en verano, así que ya me diréis quién tiene ganas de encender el horno. Se puede reconvertir a barbacoa, pero yo no tengo.
Se necesitan verduras que estén buenas asadas: tomate, berenjena, calabacín, cebolla. Se cortan en rodajas y se ponen en una bandeja de horno con un chorrito de aceite, pero muy poco. Se hornean a 200º durante aprox 30º (si hace calor, puedes huir de la cocina y echarles un vistazo cada 5-10 minutos).
Cocer un cuscús, pero no con agua sino con caldo que lleve un pellizco de especias marroquíes. Servir una cucharada de cuscús con las verduras al gusto por encima.